jueves, 11 de febrero de 2010

Melquíades, el tucán.


Con un ala tapándose los ojos, el tucán Melquiades reflexionaba como podía hacer para salir de tamaño problema, que lo tenía sumamente preocupado y tristón.


Estaba haciéndose mayor, no cabía duda; él que siempre había sido un tucán emprendedor, que arrollaba con todos los obstáculos, ponía todos sus esfuerzos al servicio de lo que quería conseguir, y siempre lo había obtenido, y de pronto...

! se encontraba con esta dificultad que no podía superar!

Se preguntaba como podía suceder que no lograra algo tan sencillo, que había hecho toda su vida, sin pensar siquiera en ello, como algo natural.

Y ahora...esto! ¿cómo era posible?

En ese momento, se acercó su nieta al árbol en que se encontraba y levántandole el ala con que se tapaba los ojos-,le dijo:

- Desde hace unos días te observo que no logras que la pieza de comida que lanzas al aire, -como hacemos todos los tucanes- te caiga en el buche ni una sola vez, pero no tenés que estar triste....

Y dándole un beso de pico le dijo:

-!Te amo, abuelo!

martes, 2 de febrero de 2010


En mi país, es habitual llamarlas "vaquitas de San Antonio"



Mariquitas de colores
que van andando la hierba,
que se asoman, que se ocultan
tal vez porque ven muy cerca
que algún humano malvado,
es capaz en sus miserias
de aplastarlas con su pie
porque envidian su belleza.

Cuando niña muchas veces
y sin que me diera cuenta,
se posaban en mi mano,
a mi brazo daban vueltas,
y después me abandonaban
y volvían a la tierra.

Aún hoy tengo el privilegio
de que una u otra vez
me visiten sin reparo
y jamás las dañaré.

Verdad es que se las ve poco,
seguro que las matamos,
con la infinita soberbia
que tenemos los "¿humanos?".
Y por eso mas que nunca
hoy debemos protegerlas,
para que sigan viviendo
en la magia mas perfecta,
no es justo que desaparezcan
de la faz de nuestra Tierra!

Y es que está en nuestras manos
el detener esta locura
de ir destruyendo a cada paso
los regalos de Natura…