Las palabras estaban allí, todas ellas, todas... esperándolo, para que estableciera luminosos puentes de camaradería, estallidos de color,gritos de amor y desesperanza, rincones de angustia y de armonía,pero... no pudo hacerlo, y su acercamiento al mundo literario se redujo a leer a quien iban dirigidas las cartas a medida que las repartía.
No hay comentarios:
Publicar un comentario